Conoce los 7 tipos de mamás:¿cuál eres tú?
Conoce los 7 tipos de mamás: ¿cuál eres tú?
Hay ciertos tipos de mamás que se han definido según algunas conductas que sobresalen en ellas. No es un secreto que los cambios imprevistos que trae la maternidad pueden provocar ciertos comportamientos en la mamá.
Asimismo, las circunstancias de su vida, el tipo de crianza que recibió y la falta de experiencia son factores que también influyen. A continuación, descubre ciertas características de algunas madres y con cuál de estas te identificas. ¡Sigue leyendo!
Los tipos de mamás que existen
La verdad es que todas las mujeres damos lo mejor de nosotras para tener éxito en nuestro rol de mamá. Ninguna lleva un manual consigo ni posee estudios al respecto, sino que van siguiendo su instinto y aprendiendo durante el crecimiento de su bebé. Pero, aunque cada una lo hace de manera distinta, muchas pueden identificarse con uno o varios de los tipos de mamás que mencionamos, a continuación.
La super anticipada
Es aquella que predice todo lo que puede suceder o lo que su hijo podría necesitar. Antes de que a su niño le falte algo, ella ha resuelto todo para proveérselo. Su mayor miedo es que su pequeño sufra, por eso lo protege anticipándose a los acontecimientos y no le deja hacer las cosas por sí mismo.
Teme que el bebé se lastime, se enferme, se frustre o le pase cualquier cosa mala. ¡Cuidado si estas conductas predominan en ti! Los niños necesitan tener sus propias vivencias para aprender a ser autónomos y precavidos. Así que, sé prudente y, al mismo tiempo, anímalos a asumir ciertos riesgos. ¡Así aprenderán la vida!
La amiga o buena onda
Es la mamá que se convierte en la confidente de sus hijos y le encanta que las fiestas de amigos se hagan en su casa. Su comportamiento se amolda fácilmente a las costumbres de estos jóvenes. Ella disfruta siendo una amiga más del grupo y en su modo de crianza:
- Le cuesta establecer normas.
- Consulta con sus hijos las decisiones de su rol como autoridad.
- Busca que ellos le cuenten todo; en especial, si son mujeres.
Esta madre huye, inconscientemente, de su rol. Ella prefiere quedar bien antes que poner límites. Por eso, puede terminar amargando la vida de quienes ama, haciéndoles sentir desatendidos y con dificultad para establecer relaciones.
Esta mamá ignora que los límites protegen y nos enseñan a relacionarnos. Los hijos necesitan aprender y respetar normas que corresponde a los padres enseñar. Los amigos los irá teniendo durante toda su vida para compartir lo que corresponde a la amistad
La mamá esponja
Se parece un poco a la mamá anticipada, aunque no es la misma. Tal como una esponja absorbe todo, esta madre absorbe el tiempo y la vida de sus hijos porque “necesita” de ellos.
Más allá de querer controlarlos, desea saber dónde están, lo que piensan, dicen y hacen. Para lograrlo, hace uso del chantaje emocional o prepara actividades en las que ella también participa sin dar lugar a espacios de intimidad.
La dócil y obediente
Este es uno de los tipos de mamás que los más pequeños “adoran”, pues ella no les define ninguna regla para que no se frustren. Desde ese temor actúa de la siguiente manera:
- Casi nunca dice “No”.
- Cede, fácilmente, a las peticiones y exigencias del niño.
- No toma control de los eventos difíciles como las pataletas.
- No enseña a sus peques sobre el esfuerzo ni la responsabilidad.
Los hijos de esta madre no conocerán límites y no sabrán esperar. De manera que, fuera de casa, pueden llegar a ser niños frustrados, maltratadores y egocéntricos.
¡Cuidado con ser este tipo de mamá! Los niños necesitan aprender a ser tolerantes a la frustración. No se les puede dar todo lo que desean porque el mundo no será así siempre con ellos.
La moderada o equilibrada
Esta mamá aprende a regular lo que siente y a respetar la personalidad e individualidad de sus pequeños. Aunque no se impone, se mantiene firme, estableciendo límites entendibles y saludables. Ella corrige con autoridad sin dejar de reflexionar de forma afectuosa. Su crianza se caracteriza por:
- No exigir acciones perfectas.
- Motivar la independencia de sus peques.
- Hacer que sus hijos vean el resultado negativo de los actos.
- Explicar con paciencia las normas y lo que se espera según su edad.
Pese a sus defectos y errores, la mamá equilibrada está muy comprometida con su rol, velando por el bienestar físico y emocional de sus retoños. Con este comportamiento logra formar niños críticos y con perspectivas propias.
La conectada
Se trata de aquella madre que está al día con las novedades de las redes sociales. Además, sigue las cuentas que hablan sobre maternidad y desarrollo infantil e indica “me gusta” a todo el contenido relacionado con estos temas. Ella se interesa por aprender estrategias para la educación y el cuidado de niños.
En esta clasificación se incluye a las mamis que comparten todas las experiencias familiares en su perfil y que, además, etiquetan a sus contactos. En ocasiones, exponen fotos vergonzosas que sus hijos jamás mostrarían. Es uno de los tipos de mamás con las que todas nos identificamos.
La superheroína o perfecta
Este es el tipo de mamá que se enfoca en cumplir las exigencias sociales: ejercitarse, comer saludable, estar perfectamente arreglada y estar equilibrada en todo. Es el modelo de madre sólo existe en tu mente y el que tú crees que debes ser, empañando y perturbando tu experiencia. Según tu ideal, esta mujer es así:
- No se equivoca.
- Desconoce el cansancio.
- Minimiza sus necesidades.
- No reconoce lo que hace bien.
- Piensa que todo lo mejor es para sus hijos.
Ella se excluye de ser feliz y su frase favorita es: “la felicidad de ellos es la mía”. Con este pensamiento ignora que no podrá cuidar bien de otro si no se atiende a sí misma ni se plantea satisfacer sus necesidades individuales.
Se trata de un modelo mental fomentado por la sociedad y que termina por frustrar a cualquier mujer deseosa de criar con amor. Con este rol imaginario se va matando el instinto materno y el vínculo afectivo madre-hijo.
No hay un manual de maternidad
Cada tipo de mamá tiene sus pros y contras. Realmente, no existen manuales ni recetas que expliquen la forma perfecta de educar a nuestros hijos. No obstante, sí hay la oportunidad de aprender y de encontrar la ayuda adecuada para llegar a ser la mamá que tu peque está necesitando.
Sabemos que todo lo que experimenta una madre puede ser agotador y confuso para ella. Por eso, ponemos a tu disposición un equipo de apoyo que te recuerde que no estás sola. Contáctanos y te acompañaremos.